En concreto, se han concentrado estudiantes y profesorado de ocho institutos. De la provincia de Córdoba, los IES Alto Guadiato y Florencio Pintado (ambos de Peñarroya-Pueblonuevo) y el IES La Fuensanta. De la provincia de Sevilla, los IES Fray Bartolomé y Fuente Nueva (Morón de la Frontera); el IES Europa (Arahal), el IES López de Arenas (Marchena) y el el IES Martínez Montañés (Sevilla).
«Nos hemos reunido para narrar nuestros textos con palabra vinculada. Se demuestra que la lectura crea vínculos entre las personas y nosotras, las personas-libro, somos la prueba de ello», explica la docente Olga Valenzuela, una de las organizadoras.
Se han compartido textos de diversos géneros: narrativa, poesía y teatro. Los autores y autoras de las obras elegidas han ido desde Lorca y Machado hasta Alice Kellen o Elvira Sastre, pasando por Almudena Grandes, Gloria Fuertes o Amalia Bautista. «Todo depende del deseo que haya provocado en el narrador el texto leído. Una persona se emociona, se identifica, se ve reflejada en un texto y es entonces cuando se lo aprende de memoria y decide entregarlo a los demás y con eso tratar de aportar algo al mundo», añade Olga Valenzuela Albarrán.El perfil del alumnado participante es muy diverso y eso hace que este proyecto sea integrador. «Hay personas con déficit de atención, con dislexia, del colectivo Lgtbiq+. Hay alumnado que solo en este tipo de encuentros es capaz de ponerse delante de los demás y hablar en público. Hay personas que se enfrentan a esto un día después de un fallecimiento familiar y que, como una compañera tiene un texto sobre una abuela fallecida, no puede escucharla y tiene que salirse», explican los docentes.
Son muchas las anécdotas de este encuentro con estudiantes como protagonistas y en el que hasta han llorado de emoción al escuchar las lecturas. «No es una simple anécdota, es tener la seguridad de que, con este proyecto, lo estamos haciendo bien».
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